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Dr. Joaquín Díaz Atienza
Son numerosas las opiniones acerca de la influencia de los medios de comunicación en la génesis de la violencia en la infancia y la adolescencia: unos resaltan su influencia negativa, para otros su influencia es neutra y para los menos sería positiva. Sin embargo, la influencia que los medios de comunicación ejercen sobre nuestros hijos sería equivalente al hecho de que un extraño estuviera sin control en nuestra casa influyendo sobre ellos durante tres/cuatro horas que es la media que la mayoría de los niños ven la televisión. Por tanto, podemos afirmar que la televisión ejerce una influencia educativa sobre nuestros hijos y, en la mayoría de la veces, sin control por parte de los padres. De otra parte, los niños y adolescentes, debido a su inmadurez, menor experiencia, menor capacidad crítica son significativamente más influenciables que los adultos y no es exagerado decir que, cuanto más pequeños, mayor es su disposición a confundir las escenas de televisión con el mundo real.
Hace algunos años, STRASBURGER (2004), realizó una revisión bibliográfica exhaustiva sobre la violencia en los medios de comunicación y la presentación de conductas violentas en niños y adolescentes. Encontrón 3500 trabajos en donde se encontró una relación positiva y 30 en donde no se pudo demostrar esa asociación.
LA VIOLENCIA EN LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN.
Si nos dedicamos a monitorizar pacientemente las escenas que comportan violencia en los medios, observaremos una serie de características:
La violencia en la televisión es presentada de forma divertida y sin graves consecuencias. Escenas que en la vida real puede ser sumamente peligrosas.
La violencia suele presentarse de forma neutra en donde prácticamente nunca se suele manifestar el dolor, el sufrimiento de la víctima.
En la mayoría de las ocasiones la violencia está relacionada con el “héroe” en donde se nos presenta como justificada eliminando cualquier atisbo de remordimiento o culpa.
La violencia puede manifestarse en una amplia variedad de formas: películas, dibujos animados, videojuegos, Internet etc.
Si observamos detenidamente los contenidos de programas para jóvenes, vemos hasta dónde la violencia es uno de los más frecuentes, incluso más que en los programas para adultos.
La violencia es interiorizada por nuestros niños y jóvenes cada vez más. Baste señalar los resultados del estudio realizado por GROEBEL en 2001 en donde el héroe más admirado por los encuestados era Schwarzeneger en su rol de “Terminator”.
En los apartados siguientes expondremos las diferentes investigaciones que se han realizado sobre este tema tan importante y tan descuidado por las autoridades y por los padres.
La bibliografía se presentará al final