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Los psicoestimulantes, por lo general, son bien tolerados
Pero ¿qué beneficios puedo esperar de ellos?, ¿qué precauciones debo tener?
Joaquín Díaz Atienza – Presidente de JSM
BENEFICIOS TERAPÉUTICOS ESPERABLES
El metilfenidato (Concerta, Medikinet, Equasym, Rubifen) tienen una acción directa y en cualquier persona, sobre la dopamina. La lisdexanfetamina (Elvanse), es una dextroanfetamina a la que se le acopla un aminoácido, la lisina, con la finalidad de que su tiempo de acción se prolongue alrededor de 10-11 horas. Su acción. igualmente, se produce sobre la dopamina fundamentalmente.
Debido al incremento de la dopamina, va a mejorar la hiperactividad y la concentración por un mecanismo farmacológico directo. La impulsividad puede mejorar, aunque por un mecanismo indirecto, es decir, en cuanto mejora la hiperactividad y la gestión de la respuesta a los diferentes estímulos ambientales. Por tanto, la mejoría esperable se produciría sobre la hiperactividad, las dificultades atencionales y, algo menos, sobre la impulsividad.
Es importante que los padres sepan que los psicoestimulantes no producen una mejoría directa sobre la capacidad de aprendizaje, sino indirectamente. Es decir, por la mejoría atencional y de la hiperactividad. Conocer esta circunstancia es importante, ya que podremos explicar el porqué algunos niños están tomando la medicación y su rendimiento académico no varía significativamente.
- Mejoría atencional. Mejora tanto la concentración, como la fatiga atencional. Incrementa el tiempo de trabajo efectivo. Este incremento de la capacidad atencional da lugar a mejoras en el rendimiento siempre que no exista algún problema específico del aprendizaje. Si su hijo/a no mejora habrá que pensar en la posibilidad de que lo padezca. Son muy frecuentes.
Otra posibilidad, es que exista una alteración en otras funciones ejecutivas, no solo en la atención. Es fácil que no encontremos con una memoria de trabajo reducida y con procesamiento cognitivo lento o poco estructurado, así como serías dificultades en la planificación de tareas.
- Mejoría de la hiperactividad. Es el síntoma que mejora de forma más visible. Esta mejoría conlleva también un mejor control de los distractores facilitando indirectamente una mejor permanencia en las realización de tareas y una mejor gestión de la
- No es que el paciente se vuelva más reflexivo, sino menos disperso en la medida que controla más los estímulos no relevantes.
EFECTOS SECUNDARIOS
Tal como hemos dicho al principio, los psicoestimulantes suelen ser bien tolerados cuando están bien indicados, algo que no siempre ocurre. ¿Pero cuáles son los efectos secundarios más frecuentes y cómo actuar?.
- Pérdida de apetito. Es muy frecuente. El problema surge cuando se ve afectada la calidad nutricional del paciente. Si la pérdida de apetito es muy intensa y el efecto terapéutico muy positivo, antes de retirar la medicación, se pueden hacer cambios con las distintas presentaciones, o bien suplementar durante un tiempo.
- Alteración del sueño. Suele presentarse, especialmente, con los de liberación prolongada. Si fuera muy importante, se pueden adelantar las tomas o realizar cambios de presentación. Hay quien recomienda la ciproheptadina por la noche.
- Efecto rebote. Consiste el recrudecimiento de los síntomas habituales del paciente, incluso más intensos que cuando estaba sin tratamiento. Suele presentarse cuando pasa el efecto farmacológico. Los de liberación prolongada los suelen presentar con menor frecuencia.
- Inhibición motora excesiva. Hay pacientes que pierden la espontaneidad de los movimientos, parece como deprimidos, tristes. Siempre habrá que valorar los pros y contras a la hora de suprimir o no la medicación. Se da con más frecuencia en inatentos y en niñas.
- Alteraciones cardiovasculares. Si el paciente no presenta problemas previos, los psicoestimulantes producirán un incremento de la frecuencia cardiaca y, ligeramente, las cifras de tensión arterial. Lo habitual es que no haya que retirar la medicación. Si aparecen extrasístoles, morderse las uñas, mayor nerviosismo, habrá que pensar en un paciente que, previamente, ya presentaba, cuando menos, unos niveles de ansiedad rasgo altos. En estos caso, no es infrecuente que tengamos que plantearnos prescribir la atomoxetina.
- Menos frecuentes son: las nauseas, las cefaleas, las molestias gástricas. Suelen ser transitorios.
- Talla. Suelen afectar al tratamiento, especialmente cuando no hay descansos. Sin embargo, la opinión más generalizada es que con el estirón puberal se compensa. En mi experiencia, aunque científicamente sea irrelevante, es que suele ser así.
- Dependencia.Efectivamente, suelen crear dependencia, aunque es muy variable de unos pacientes a otros. Todos los padres saben que cuando se suprime el tratamiento, después de un tiempo de tomarlo, durante la primera semana la situación “es insoportable”, para volver a la situación basal que presentaba cuando no tomaba el tratamiento.
- Irritabilidad. Puede presentarse en algunos pacientes. No olvidemos que es un psicoestimulante. En estos casos, si es muy intensa, hay que pensar en la atomoxetina.
- Un comentario aparte son los tics, epilepsia, la obsesividad previa a tratamiento, pacientes con síntomas pragmáticos de la comunicación, TGD y retraso mental.
El metilfenidato y las anfetaminas (Elvanse), en unos más y en otros menoo, suelen empeorar los tics. Por tanto, hay que llevar un control más exhaustivo. El lo que se refiere a la epilepsia, si está bien controlada, pueden prescribirse los psicoestimulantes. En las inestables, no los recomiendo. Cuando un paciente presenta rasgos obsesivos, sean aislados o formando parte de un Síndrome de Aspeger o un trastorno pragmático de la comunicación, los psicoestimulantes deben prescribirse con mucha precaución, ya que pueden empeorar la obsesividad. Por último, en pacientes con retraso mental, puede aparecer mayor irritabilidad, incluso trastornos de conducta.
Existen otros efectos secundarios pero son más raros y, por tanto, no se abordarán en este post. Espero que sea de utilidad a los padres de Jóvenes Solidarios los Millares y a todos aquellos, que sin pertenece a la asociación, lo lean.