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¿Dopaje, tratamiento, negocio de la industria farmacéutica y de algunos personajes?. Siempre en beneficio de la infancia y adolescencia escolarizada y en contra de los oportunistas de desgracias1
Consumo de psicoestimulantes en Andalucía, por marca comercial y provincias: un reto a los políticos.
Antes de jubilarme intenté, por activa y por pasiva , conocer la evolución de la prescripción de psicoestimulantes y anfetaminas a los alumnos andaluces. Todo fueron obstáculos, me jubilé sin conseguirlo, a pesar de que la ley, en cierta forma, te lo permite. Pero nadie quiere dar el “dato”.
Adelanto que estoy muy preocupado, tanto por mi sospecha en que se han disparado las prescripciones, como por el hecho de que no se está traduciendo en mejoras de los rendimientos académicos globales, aunque haya casos concretos que sí. Más aún, tengo el temor, SOLO EL TEMOR, de que las prescripciones se están realizando, más como una medida de contención del alumno/a en el aula, que como una medida terapéutica; que se están intentando ahorrar recursos humanos a través del dopaje de alumno, una especie de camisa de fuerza química con la que un amplio sector de la población educativa, incluyendo algunas asociaciones de afectados, están de acuerdo.
La única forma que tengo para saber hasta dónde es así, es disponiendo de los datos de prescripción por provincias andaluzas, tanto de los psicoestimulantes, como de los no psicoestimulantes en el tratamiento del “TDAH”. Estos datos me permitirían realizar una investigación fármaco-epidemiológica y así precisar la evolución prescriptiva y su relación con la población diana a la que debería estar dirigida.
Por ello, emplazo a los políticos del parlamento de Andalucía: Ciudadanos, Izquierda Unida, Podemos, PSOE-A y PP- A a que esos datos sean facilitados a Jóvenes Solidarios los Millares, una ONG que trabaja con la infancia y adolescencia y sus derechos.
Este post ha sido enviado por email a todos nuestros partidos políticos. ¿Serán capaces de responder?. Creo que sí, si no tendríamos que pensar que no les interesa diferenciar entre doping, tratamiento y negocio al que puedan estar sometidos nuestros niños/as y jóvenes en Andalucía.
Anticipadamente, gracias.
Dr. Joaquín Díaz Atienza
HAN CONTESTADO:
NADIE!!
Footnotes
- Quiero dejar claro que yo no estoy en contra del tratamiento farmacológico en el TDAH u otros problemas de salud mental en la infancia y adolescencia. Simplemente, pretendo que, tanto las indicaciones de tratamiento, como los seguimientos correspondientes, como el balance riesgo/beneficio, sean los éticamente apropiados
